sábado, 17 de abril de 2010

Carta del Director del Hospital Justo José de Urquiza

Como Director del Hospital Justo José de Urquiza de Concepción del Uruguay y por expresiones agraviantes e injuriantes hacia mi persona, vertidas en los medios locales “La Prensa Federal”; “El Miércoles Digital” y otros medios de comunicación por el Secretario de ATE Oscar Muntes es mi deseo hacer conocer la verdad de los hechos.
En la carta documento que envía como respuesta el Sr. Muntes niega tener vinculación con las publicaciones realizadas, asimismo desconoce y rechaza la autoría de dicha publicación, delegando responsabilidad a los medios locales.
El señor Muntes también niega haber acusado que el “Director parece un dictador”; “que arancelamiento no ha crecido por el manejo desprolijo y anárquico del funcionamiento de la institución”; negó haber dicho que “el Director efectúa persecuciones y que amenaza a los empleados y que paga, y efectúa aprietes”.
Quiero destacar que durante esta gestión de cuatro años se incrementó la recaudación por cobro de Obras Sociales pasando de un fondo de 367.813,24 pesos anuales, a 2.800.217,82 pesos lo que significa un incremento sustancial.
Ante la situación generada y aceptando la procedencia del reclamo de los empleados, no así la metodología, y siendo el máximo responsable de esta Institución solicito por este medio, al grupo autodenominado “Los 20 Locos de Siempre”, la revisión de esta situación y la concurrencia al diálogo, que sistemáticamente se han negado, considerando los eventuales daños que puedan causar a la población usuaria de este hospital.
Cabe recordar que el 31/03 del corriente año no concurrieron a audiencia conciliatoria de la Dirección de Trabajo, no cumplen las guardias mínimas, la basura se acumula en los rincones del hospital generando una seria amenaza para la salud de los pacientes, andan por las salas de juerga y con máscaras de monos como si estuvieran en carnaval, amenazando a los compañeros de trabajo (existen presentaciones en Asesoría Legal), golpeando tapas de ollas y promoviendo desorden. Hemos tenido que clausurar habitaciones. Tapan las cañerías de los baños con trapos de pisos (que obviamente no usan para limpiar); todo lo cual se encuentra constatado por escribano público y corroborado y abalado por personal responsable del Hospital Justo José de Urquiza.
Entiendo que los gremialistas necesitan el conflicto para que su existencia tenga sentido, pero no acepto la mentira y el cambio sistemático en los reclamos. Han desvirtuado todo y de la cuestión salarial no se escucha nada (eso me llama la atención). Han prometido en reuniones trabajar en conjunto, y les he solicitado por nota las fechas, y soy yo quién espera (mentira que no los atiendo). Lo que sí es cierto, es que primero hablaba con el señor Muntes a solas y luego pasaban los demás, como así también que les he dado trabajo en el hospital a todos los hijos y familiares de los gremialistas, entre otros.
Otros gremialistas elegidos junto con ellos en el mismo acto eleccionario han sido desplazados y no los convocan a la asamblea porque piensan diferente (profesionales y no profesionales, son varios).
Deseo agradecer que al resto de los empleados del Hospital (814) si, OCHOCIENTOS CATORCE, que han entendido que lo importante es el bienestar de la población y el funcionamiento de la Institución.
Este Hospital que brinda tantos servicios a nuestra comunidad, es el mejor de la Provincia de Entre Ríos (y esto es mérito de todos los empleados), según dichos de muchos médicos, jefes de servicios, la ex Secretaria de Salud Graciela Traverso y el Vicegobernador José Eduardo Lauritto.
Podría brindar mucha información sobre el Curriculum Vitae de cada uno de los líderes de la Asamblea, pero sería deshonesto de mi parte hacerlo público por diferentes medios (aún siendo tantos nos conocemos muy bien) pero créame la población, que hay para todos los gustos.
Quisiera aclararle a los asambleístas que han solicitado mi renuncia, que estoy ocupando un cargo político (dentro de poco cumplo 9 años en la Dirección del Hospital Urquiza) y le debo la designación al poder político elegido democráticamente, y son ellos los que me deben pedir que deje el cargo.
Saluda atte., Dr. Ricardo Derendinger, Director del Hospital Justo José de Urquiza.

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