Como se adelantara, el corte ambientalista de Arroyo Verde, levantó la barrera para que los argentinos que viajaban al Uruguay para ver el partido de características decisivas para la Selección Nacional de fútbol, pudieran pasar sin tener que alargar su viaje más de 150 kilómetros si lo hubieran hecho por el paso fronterizo Colón – Paysandú.
La medida de los ambientalistas de Gualeguaychú, tuvo diversa repercusión entre los mismos habitantes de la ciudad del sur entrerriano, ya que hubo muchos vecinos que consideraron que era una postura ridícula y que demostraba que el corte estaba perdiendo vigencia.
“Oh luchamos por el medio ambiente como se debe o nos bajamos de la ruta”, fue una de las frases que se escucharon. “No se puede dejar pasar a una hinchada de fútbol por más que sea la Selección la que juegue. Si el corte está, que esté verdaderamente”, fue otra de las críticas. Estas y otras tantas dejaron a la vista la diferencia de opinión que hay actualmente.
Por otra parte, respecto a lo observado en el emblemático corte de ruta, los ambientalistas estuvieron presentes desde la 22 del martes controlando el paso vehicular al Uruguay, sin exigir comprobantes –entradas adquiridas con anticipación– por lo que los viajeros pasaron sin problemas, salvo aquellos que pagaron el peaje en el puente San Martín, pero que no contaban con el seguro del MERCOSUR y debieron retornar para solucionar el problema, alguno de los cuales no pudieron regresar.
Optimismo. Cada auto que pasaba, donde se vieron todos los colores de los cuadros argentinos, como Boca, Independiente, Tigre o River, tenía a sus ocupantes con un gran optimismo y la mayoría coincidía con la esperanza del “San Palermo”. Tras recibir los volantes y ser notificados de que la flexibilidad del corte se mantendría hasta las 14 del jueves, los hinchas argentinos continuaron su viaje. Por un día, el puente que une Gualeguaychú Fray Bentos, volvió a sentir sobre su calzada en tránsito vehicular, llevando la esperanza de los futboleros a la Banda Oriental, pero dando origen a serios cuestionamientos de quienes no estuvieron de acuerdo con la medida o con aquellos que son participes del levantamiento definitivo.
La medida de los ambientalistas de Gualeguaychú, tuvo diversa repercusión entre los mismos habitantes de la ciudad del sur entrerriano, ya que hubo muchos vecinos que consideraron que era una postura ridícula y que demostraba que el corte estaba perdiendo vigencia.
“Oh luchamos por el medio ambiente como se debe o nos bajamos de la ruta”, fue una de las frases que se escucharon. “No se puede dejar pasar a una hinchada de fútbol por más que sea la Selección la que juegue. Si el corte está, que esté verdaderamente”, fue otra de las críticas. Estas y otras tantas dejaron a la vista la diferencia de opinión que hay actualmente.
Por otra parte, respecto a lo observado en el emblemático corte de ruta, los ambientalistas estuvieron presentes desde la 22 del martes controlando el paso vehicular al Uruguay, sin exigir comprobantes –entradas adquiridas con anticipación– por lo que los viajeros pasaron sin problemas, salvo aquellos que pagaron el peaje en el puente San Martín, pero que no contaban con el seguro del MERCOSUR y debieron retornar para solucionar el problema, alguno de los cuales no pudieron regresar.
Optimismo. Cada auto que pasaba, donde se vieron todos los colores de los cuadros argentinos, como Boca, Independiente, Tigre o River, tenía a sus ocupantes con un gran optimismo y la mayoría coincidía con la esperanza del “San Palermo”. Tras recibir los volantes y ser notificados de que la flexibilidad del corte se mantendría hasta las 14 del jueves, los hinchas argentinos continuaron su viaje. Por un día, el puente que une Gualeguaychú Fray Bentos, volvió a sentir sobre su calzada en tránsito vehicular, llevando la esperanza de los futboleros a la Banda Oriental, pero dando origen a serios cuestionamientos de quienes no estuvieron de acuerdo con la medida o con aquellos que son participes del levantamiento definitivo.
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