Otra vez los caballos sueltos generaron serios problemas en distintos puntos de la ciudad y fueron un verdadero peligro para el tránsito vehicular. En el acceso a Concepción del Uruguay, la existencia de varios equinos sobre la calzada demandaron la inmediata intervención de personal policial de comisaría Segunda, que debió arrear estos animales a un lugar más seguro, alejándolos del paso de los vehículos que entraban y salían de la ciudad. Esto afortunadamente no generó accidentes y la situación se normalizó en pocos minutos.La misma escena se vio en calle Urquiza y 12 de Octubre, donde en horas de la mañana, dos caballos pastaban en la zona de la plazoleta y aceras del viejo hospital, cruzándose peligrosamente al paso de los autos. Vecinos lograron espantar a los animales que se introdujeron en los terrenos del viejo nosocomio, trascendiendo que serían propiedad de un habitante del barrio San Isidro, que generalmente los deja sueltos para que se alimenten.
Si bien hay ordenanzas que contemplan estas infracciones, muchas veces la falta de recursos o la imposibilidad de los propietarios de responder económicamente a las multas, son algunos de los motivos que impedirían que se apliquen las sanciones. Según se pudo observar en algunos casos, estos animales, cuando fueron retenidos, se restituyeron a sus dueños ya que realizan presentaciones de amparo debido a que son en su mayoría carenciados y estos son sus herramientas de trabajo. El compromiso de no volver a repetir la infracción se hace, pero lamentablemente esto vuelve a suceder y sin miras de solución, pese a que en algunos casos los accidentes con equinos sueltos causaron víctimas fatales.
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