Complicada labor para despejar el puente y realizar los peritajes

Vistas irritadas, rostros demacrados y tiznados por el humo, daban cuenta de lo que fue la noche del domingo y la madrugada del lunes en el puente del complejo Zarate Brazo Largo, donde un camión se incendió causando importantes daños materiales, a lo que se sumó el duro y dificultoso rescate de cuatro turistas que cayeron a un arroyo de la ruta Nacional 12. Agotados y a la espera de sus relevos, gendarmes, bomberos, empleados de la empresa de caminos y policías provinciales, seguían trabajando duro en procura de despejar el puente siniestrado para dejar paso al trabajo de los especialistas que deberán determinar el grado del daño sufrido y la posibilidad o no de habilitar el paso vehicular, tarea que señalaban puede demandad entre 48 y 72 horas.
Largas colas de camiones seguían a la espera en el destacamento de Gendarmería de Brazo Largo y el puesto caminero de la Policía de Entre Ríos, esperanzados en que se les permita continuar viaje, pese a que permanentemente se les confirmaba que el puente estaba clausurado totalmente y debían desviar por Rosario.
“Este brasilero no se da una idea del daño que causó”, se escuchó decir a uno de los encargados del puente que presenciaba los trabajos de remoción de la carga siniestrada y el camión con semi que había quedado atascado sobre la vías del ferrocarril. Complicada labor de personal de mantenimiento para cortar los guarda rail afectados y barandas, se extendieron a lo largo de toda la mañana, ante la atenta mirada de los gendarmes que debieron tomar intervención ante el intento de cruce de un grupo de autos que se ganó al puente.
Con el pretexto de traer una filmación del incendio para un canal, una camioneta blanca con varios ocupantes subieron hasta el lugar del corte, a la que otros vehículos se acoplaron. La “avivada” fue advertida por los efectivos que le cortaron el paso, descubriendo que no tenía tal imagen, por lo que los hicieron regresar. Ante esta situación, el conductor descendió y señaló a los gendarmes que era un suboficial mayor del Ejército, aparentemente intentando lograr que lo autorizaran al cruce, pero de nada sirvió, por lo que tuvo que retornar por donde había llegado con visibles muestras de malestar.
El accidente- Respecto al hecho en sí, se pudo saber que el conductor de nacionalidad brasilera perdió el control del transporte y tras impactar en el guarda rail interno, se fue contra el sector de las vías del ferrocarril, donde pasó las barandas y quedó detenido contra la base de los obenques. El impacto provocó un cortocircuito que dio inicio a un pequeño foco ígneo, pero la rotura del tanque de combustible hizo que las llamas se extendieran y tomaran la carga de neumáticos que transportaba, lo que hizo que el siniestro sea prácticamente incontrolable. Los trabajos duraron hasta pasada la media noche, pero cuando todo parecía normalizarse, el fuego se reavivó y oblogó a grandes esfuerzos para combatirlo.
Los daños causados al puente no se pueden determinar hasta que los ingenieros hagan su trabajo con distintos equipos. Desde ya se descarta que es necesario el reemplazo, pero se trata de determinar si el puente se puede usar con algunas restricciones o se debe paralizar totalmente el paso hasta que estos elementos sean recambiados.
Hubo rumores de que el incidente fue intencional, o que el camionero estaba en estado de ebriedad, lo que luego fue desvirtuado totalmente, trascendiendo que el conductor declaró sobre lo ocurrido y quedó en libertad.