En medio de un registro de lluvia que ha superado los 1400 milímetros en tres meses y la intensa crecida de los ríos, el equipo de trabajo de la Dirección de Vialidad extrae durante las 24 horas el excedente de agua para evitar filtraciones en los terraplenes que mantienen transitable la ruta provincial Nº 45. De otro modo, la población de Holt Ibicuy, en el sur entrerriano, quedaría totalmente aislada por tierra.
El jefe de la Zonal Islas de la Dirección Provincial de Vialidad (DPV), José Alberto Maetta, destacó la labor de los empleados que trabajan a destajo en la construcción y mantenimiento de un terraplén en el acceso a Ibicuy sobre la Ruta Provincial. La defensa impide que el agua proveniente del Paraná Pavón y del Gualeguay interrumpa el único ingreso vía terrestre.
En los últimos tres meses llovieron 1400 mm y anegaron gran parte del Departamento Islas. La semana pasada trabajaron sin parar para sacar el excedente de agua con electro bombas. Desde la Zonal de la DPV se informó que durante las 24 horas se controla el tránsito pesado para evitar un efecto contraproducente en el terraplén y que genere filtraciones de sedimento en el mismo.
“Los terraplenes que están sobre la margen derecha se realizaron en la creciente del 2007 pero debimos reforzarlos porque la creciente es superior. Ahora decidimos hacer otro que se encuentra sobre la margen izquierda porque toda el agua de esos campos desagua en la alcantarilla de la ruta pero al taparlas para que no ingrese el agua del Gualeguay corremos el riesgo que el agua de las últimas grandes lluvias corte la ruta de la margen izquierda. Por eso decidimos trabajar con una retroexcavadora y hacer la defensa”, explicó Maetta.
Detalló que el temblor provocado por los 70 camiones jaulas y 5 de arena que transitan por el lugar provocan pequeñas socavaciones y filtraciones en el talud. “La gente pensó que el ingreso se cortaba. Pero tenemos que explicar que cuando el agua que se filtra es clara quiere decir que pasa por una raíz u otro tipo de vegetación presente, es decir no lleva sedimento. Caso contrario, si el agua es sucia o marrón quiere decir que transporta sedimento, en ese caso sí podríamos hablar de un corte de la ruta. Pero gracias al trabajo que estamos llevando adelante eso no va a pasar”, afirmó el jefe zonal.
Maetta no oculta su orgullo por la fortaleza de la defensa que “hasta ahora y de no crecer más los cursos hídricos antes nombrados se mantendrá en pie. Esto aguanta gracias al trabajo de los empleados viales. Tenemos gente de Paranacito e Ibicuy. Estos días hemos estado trabajando 10 o 12 horas sacando agua con las bombas”, agregó.
Al igual que en muchas partes del territorio provincial en los últimos tres meses llovió en el Departamento Islas 1400 mm lo que provocó el desborde los cursos hídricos de la región y anegará los accesos a varias poblaciones como Ñacay y Villa Paranacito dónde también se construyeron defensas.
Por último, destacó la construcción de los flamantes accesos a Paranacito e Islas que no de mediar inconvenientes estarán terminados este año. “Tengo 50 años y desde muy chico tengo conocimiento que la gente pide contar con una entrada pavimentada. Estoy ilusionado con ver terminada la obra. A mi suegro lo saco a ver el avance de la obra en Paranacito y se emociona, se le caen las lágrimas, no tienen palabra de agradecimiento”.
El jefe de la Zonal Islas de la Dirección Provincial de Vialidad (DPV), José Alberto Maetta, destacó la labor de los empleados que trabajan a destajo en la construcción y mantenimiento de un terraplén en el acceso a Ibicuy sobre la Ruta Provincial. La defensa impide que el agua proveniente del Paraná Pavón y del Gualeguay interrumpa el único ingreso vía terrestre.
En los últimos tres meses llovieron 1400 mm y anegaron gran parte del Departamento Islas. La semana pasada trabajaron sin parar para sacar el excedente de agua con electro bombas. Desde la Zonal de la DPV se informó que durante las 24 horas se controla el tránsito pesado para evitar un efecto contraproducente en el terraplén y que genere filtraciones de sedimento en el mismo.
“Los terraplenes que están sobre la margen derecha se realizaron en la creciente del 2007 pero debimos reforzarlos porque la creciente es superior. Ahora decidimos hacer otro que se encuentra sobre la margen izquierda porque toda el agua de esos campos desagua en la alcantarilla de la ruta pero al taparlas para que no ingrese el agua del Gualeguay corremos el riesgo que el agua de las últimas grandes lluvias corte la ruta de la margen izquierda. Por eso decidimos trabajar con una retroexcavadora y hacer la defensa”, explicó Maetta.
Detalló que el temblor provocado por los 70 camiones jaulas y 5 de arena que transitan por el lugar provocan pequeñas socavaciones y filtraciones en el talud. “La gente pensó que el ingreso se cortaba. Pero tenemos que explicar que cuando el agua que se filtra es clara quiere decir que pasa por una raíz u otro tipo de vegetación presente, es decir no lleva sedimento. Caso contrario, si el agua es sucia o marrón quiere decir que transporta sedimento, en ese caso sí podríamos hablar de un corte de la ruta. Pero gracias al trabajo que estamos llevando adelante eso no va a pasar”, afirmó el jefe zonal.
Maetta no oculta su orgullo por la fortaleza de la defensa que “hasta ahora y de no crecer más los cursos hídricos antes nombrados se mantendrá en pie. Esto aguanta gracias al trabajo de los empleados viales. Tenemos gente de Paranacito e Ibicuy. Estos días hemos estado trabajando 10 o 12 horas sacando agua con las bombas”, agregó.
Al igual que en muchas partes del territorio provincial en los últimos tres meses llovió en el Departamento Islas 1400 mm lo que provocó el desborde los cursos hídricos de la región y anegará los accesos a varias poblaciones como Ñacay y Villa Paranacito dónde también se construyeron defensas.
Por último, destacó la construcción de los flamantes accesos a Paranacito e Islas que no de mediar inconvenientes estarán terminados este año. “Tengo 50 años y desde muy chico tengo conocimiento que la gente pide contar con una entrada pavimentada. Estoy ilusionado con ver terminada la obra. A mi suegro lo saco a ver el avance de la obra en Paranacito y se emociona, se le caen las lágrimas, no tienen palabra de agradecimiento”.
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