Los comedores escolares en el Departamento Uruguay brindan el almuerzo a 3000 chicos durante los meses de vacaciones. Pero la tarea no sólo se limitan a los alumnos de las escuelas sino también a las colonias de vacaciones de los jardines muicipales y del CEF, lo que engrosó, este año, el número de chicos. El trabajo hasta el momento se lleva a cabo con toda normalidad y solo los indignantes destrozos a la Escuela Bessi ocurridos la semana pasada alternaron esa normalidad.
Miguel Iriarte, responsable de los comedores del Departamento Uruguay contó a la experiencia, aún en curso, de brindarle comida a chicos que le necesitan. “Los Comedores funcionaron normalmente, como lo han hecho siempre en tiempo de vacaciones, con la nomina del año pasado. Este año le agregamos los chicos de la colonia de vacaciones que funciona en el Centro de Educación Física, apoyamos a las colonias de los jardines municipales y la escuela 102 que es privada con participación del estado. Esta escuela se encuentra dentro de la estancia San Pedro con una colonia a la que hace 3 años que estamos apoyando”.
Todos estos establecimientos que requieren del apoyo de los comedores en parte de diciembre, enero y febrero lleva la cifra de chicos a casi 3 mil, como bien relata Iriarte “tenemos 8 mil chicos en tiempo de clases, en tiempos normales de estudio en todo el Departamento. Esa cifra queda en casi 3 mil en vacaciones, en todo el departamento Uruguay”.
Semejante cantidad de chicos que necesitan la ración diaria de alimentos obliga también a la presencia de personal para su atención, por esto el titular de los Comedores explicó que “el personal de planta permanente que tenemos es de 60 personas”, a las que se suman “mas o menos 25 de suplencias”. Por esto, Iriarte grafica que “nos vamos arreglando con las vacaciones de cada uno de ellos. Si en algunas escuelas tenemos cuatro, dos salen de vacaciones”, pero también “en algunos casos trasladamos personal a otras escuelas si es necesario, siempre con el personal del Ministerio”.
EN CASA O EN LA ESCUELA. Muchos de los chicos comen en las escuelas pero también, en varios casos, regresan a sus casas con una bolsa de alimentos dos veces por semana. Iriarte explicó como se dan estos casos “la mayoría de las escuelas, por ejemplo la 36, 110, 93, 117, los chicos comen ahí y en algunas mas o menos chicas le damos dos o tres veces el comestible”, reafirmando la idea primaria de que los chicos tengan siempre sus raciones necesarias a pesar de no concurrir a las escuelas. Todo este trabajo que se ve poco en las vacaciones “se mantiene en febrero y después en marzo se comienza otra vez con los 8 mil chicos normales en tiempo del ciclo lectivo”.
Iriarte volvió a destacar que “estamos trabajando bien. Por ahí hay chicos que no concurren, pero eso pasa todos los años. En una nomina de 30 van 20 o en una semana va la mitad y en la otra todos”. Las nominas que incluyen a los chicos que recibirán el almuerzo durante las vacaciones “la confecciona la directora de cada escuela. Nosotros ya le pedimos en noviembre” el listado de los chicos con los que se trabajaran durante los tres meses de vacaciones y “en base a esto se elaboran los presupuestos para enero y febrero”.
LAMENTABLE. La única mancha oscura en vacaciones llegó desde fuera del programa, cuando manos desconocidas y nada solidarias inutilizaron los alimentos almacenados en la Escuela Besi, donde se atiende a más de un centenar de chicos. Para Iriarte fue mas que “lamentable, porque hemos perdido comestible de 3000 a 3500 pesos, pero lo mas lamentable es que no llevaron nada, solo hicieron destrozos, arruinando toda la mercadería que teníamos para enero y febrero”. Para poder reponer lo perdido y continuar con la atención a los chicos, el funcionario habló “con el director de comedores quien hará un reconocimiento en el refuerzo de la partida de enero y febrero para poder solucionar esto”. En esa escuela se perdió toda la partida de carne, galletitas, huevos, harina, que fueron tirados al piso, rotos, sin nada que pudiera salvarse.
Miguel Iriarte, responsable de los comedores del Departamento Uruguay contó a la experiencia, aún en curso, de brindarle comida a chicos que le necesitan. “Los Comedores funcionaron normalmente, como lo han hecho siempre en tiempo de vacaciones, con la nomina del año pasado. Este año le agregamos los chicos de la colonia de vacaciones que funciona en el Centro de Educación Física, apoyamos a las colonias de los jardines municipales y la escuela 102 que es privada con participación del estado. Esta escuela se encuentra dentro de la estancia San Pedro con una colonia a la que hace 3 años que estamos apoyando”.
Todos estos establecimientos que requieren del apoyo de los comedores en parte de diciembre, enero y febrero lleva la cifra de chicos a casi 3 mil, como bien relata Iriarte “tenemos 8 mil chicos en tiempo de clases, en tiempos normales de estudio en todo el Departamento. Esa cifra queda en casi 3 mil en vacaciones, en todo el departamento Uruguay”.
Semejante cantidad de chicos que necesitan la ración diaria de alimentos obliga también a la presencia de personal para su atención, por esto el titular de los Comedores explicó que “el personal de planta permanente que tenemos es de 60 personas”, a las que se suman “mas o menos 25 de suplencias”. Por esto, Iriarte grafica que “nos vamos arreglando con las vacaciones de cada uno de ellos. Si en algunas escuelas tenemos cuatro, dos salen de vacaciones”, pero también “en algunos casos trasladamos personal a otras escuelas si es necesario, siempre con el personal del Ministerio”.
EN CASA O EN LA ESCUELA. Muchos de los chicos comen en las escuelas pero también, en varios casos, regresan a sus casas con una bolsa de alimentos dos veces por semana. Iriarte explicó como se dan estos casos “la mayoría de las escuelas, por ejemplo la 36, 110, 93, 117, los chicos comen ahí y en algunas mas o menos chicas le damos dos o tres veces el comestible”, reafirmando la idea primaria de que los chicos tengan siempre sus raciones necesarias a pesar de no concurrir a las escuelas. Todo este trabajo que se ve poco en las vacaciones “se mantiene en febrero y después en marzo se comienza otra vez con los 8 mil chicos normales en tiempo del ciclo lectivo”.
Iriarte volvió a destacar que “estamos trabajando bien. Por ahí hay chicos que no concurren, pero eso pasa todos los años. En una nomina de 30 van 20 o en una semana va la mitad y en la otra todos”. Las nominas que incluyen a los chicos que recibirán el almuerzo durante las vacaciones “la confecciona la directora de cada escuela. Nosotros ya le pedimos en noviembre” el listado de los chicos con los que se trabajaran durante los tres meses de vacaciones y “en base a esto se elaboran los presupuestos para enero y febrero”.
LAMENTABLE. La única mancha oscura en vacaciones llegó desde fuera del programa, cuando manos desconocidas y nada solidarias inutilizaron los alimentos almacenados en la Escuela Besi, donde se atiende a más de un centenar de chicos. Para Iriarte fue mas que “lamentable, porque hemos perdido comestible de 3000 a 3500 pesos, pero lo mas lamentable es que no llevaron nada, solo hicieron destrozos, arruinando toda la mercadería que teníamos para enero y febrero”. Para poder reponer lo perdido y continuar con la atención a los chicos, el funcionario habló “con el director de comedores quien hará un reconocimiento en el refuerzo de la partida de enero y febrero para poder solucionar esto”. En esa escuela se perdió toda la partida de carne, galletitas, huevos, harina, que fueron tirados al piso, rotos, sin nada que pudiera salvarse.
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