jueves, 12 de noviembre de 2009

La publicación “Déméter 2010” dedica un capítulo especial para la agricultura argentina

Todos los años el “Club Déméter” edita un libro que contiene análisis prospectivos y sintéticos de temas de actualidad agropecuaria mundial, evaluando el rol que éstos pueden tener sobre la evolución de la agricultura francesa.
El Club Déméter, creado en 1987, es una asociación de dirigentes y jefes de empresas del mundo agro económico francés que tiene por objetivo constituir un espacio de reflexión que permita el intercambio y el debate con el fin de anticipar los posibles cambios en la agricultura y en el agro negocio de Francia.

En esta ocasión, el “Déméter 2010, Economie et stratégies agricoles”, contiene un “Dossier Argentine” en el cual el Director de la Estación Experimental Agropecuaria del INTA de Concepción del Uruguay, Ing. Rubén Devoto, comparte la autoría de un trabajo junto con dos economistas de la Comisión Económica para América latina y el Caribe (CEPAL), Roberto Bisang y Guillermo Anllo. Otros cuatro artículos, preparados por investigadores argentinos y franceses (Dra. Martine Guibert, Profesores Susana Grosso y Guillermo Hillcoat), completan el Capítulo sobre Argentina.

Sintéticamente, el trabajo de coautoría del profesional del INTA de Concepción del Uruguay, se detiene en analizar los cambios productivos, tecnológicos e institucionales del sector agroalimentario argentino, en concomitancia con lo ocurrido al nivel internacional; cambios que modifican el paradigma previo y, por lo tanto, el sentido y contenido de la “institucionalidad” preexistente. Así, mientras que las instituciones previas respondían a demandas de actividades segmentadas (de manera vertical: “lo primario”, “la industria”), las nuevas formas de organización que enlazan al productor primario con la industria, la comercialización y la demanda final (generalmente bajo la forma de redes contractuales) trastoca la institucionalidad precedente, al tiempo que induce el desarrollo de otra que, necesariamente, debe contener los intereses del conjunto (de manera horizontal “la cadena de la soja”, “la cadena del vino”). Así, en la actualidad, junto con la institucionalidad gremial originada en un paradigma tecno- productivo del siglo pasado evoluciona, y se consolida en paralelo, otra institucionalidad que tiene en lo tecnológico, el epicentro de sus motivaciones (tal es el caso, entre otras de AAPRESID, ASAGIR, MAIZAR, Fundación Pro Arroz, etc.).

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